Sólo
tenemos que recolectar todo tipo de hojas que encontremos en la plaza, las
veredas o en nuestro jardín, teniendo cuidado cuando las levantamos del piso,
ya que puede haber algún bichito escondido en ellas, como hormigas o pequeñas
arañas.
Luego de
recolectarlas hay que ponerlas dentro de las páginas de un cuaderno, revista, o por ejemplo la guía
telefónica (que es pesada y su papel es absorbente) más o menos por una semana.
De esta forma las hojas se van a deshidratar y recién después
podremos usarlas